¿Debo ir a África para poder cumplir la Gran Comisión?

Una tarea nos ha sido encomendada: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura”. (Marcos 16:15 R.V)

Pero… detengámonos un poco antes de continuar y pensemos un momento en:

1. ¿Será que debemos ir muy lejos para poder cumplir con este mandato?

2. ¿Debemos tomar un avión e ir a África a hablar de Dios?

¡¡Seria fabuloso!! Pero déjame decirte que ni tu ni yo, necesitamos hacer un viaje de 12 horas o más para poder hablar de Jesús; lo podemos hacer aquí y ahora con la persona que está a nuestro lado, en nuestra familia, a nuestros vecinos, compañeros de estudios, … tantas y tantas personas que nos rodean y que, aunque en algunas, no pareciera estar la necesidad de Dios; la verdad es que todos, absolutamente todos, necesitan escuchar, conocer y recibir el mensaje de salvación.

Ellos necesitan saber el hecho de que Jesucristo, el Hijo de Dios, estuvo un tiempo aquí en la tierra y vivió, sufrió y sintió como cada uno de nosotros, cargó una cruz tan pesada en su espalda, solo para que tú y yo no tuviéramos que pasar por ese castigo que era nuestro, murió en una cruz para darnos salvación, libertad y sanidad. Pero la historia no terminó ahí, porque al tercer día resucitó y venció la muerte para darnos vida y ¡¡¡vida en abundancia!!!

Es por esto y mucho más, que el pasado lunes 18 de mayo nos unimos como Iglesia Fraternidad Cristiana Filadelfia, para llevar a cabo una obra de evangelización por todo el Retiro de los Indios.

Llegamos a cada casa hablando de Jesucristo, y en mi experiencia personal fue algo emocionante y a la vez desafiante, porque no sabíamos cómo nos iban a recibir o qué tan dispuestos iban a estar a la palabra de Dios, pero sentí un gran respaldo cuando nos recibían, nos escuchaban –no a nosotros sino a Su Palabra- aun siendo algunos de otras religiones, abrieron las puertas de sus casas y lo mejor de su corazón, ese día hubo fiesta en los cielos, puesto que muchas personas aceptaron a Cristo en su corazón. Fue un gozo como iglesia ver tantas almas sedientas de Dios, caminando a los brazos del Padre Eterno.

“No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos”. Gálatas 6:9.

Así que no creas que misionero es solo el que sale de casa para nunca volver. Tu tienes una misión que cumplir a la vuelta de la esquina (es más, no tan lejos, en tu casa, con tus papás y hermanos): La misión de publicar el Plan de Salvación. Llegó la hora de cumplir la Gran Comisión desde aquí y hasta lo último de la tierra (Sí, eso incluye África).

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